El temporalizador del Ayuntamiento de Siero, 130 primaveras de historia y una referencia con el de la Plaza del Sol

Esto mismo sucede en relojes tan famosos como el de la madrileña Puerta del Sol desde la que se ofrecen por televisión las tradicionales Campanadas o el de la apariencia de la Diputación Provincial de Zaragoza.

Más allá de la peculiaridad, en el caso del temporalizador del Consistorio de Siero se negociación de una habitación cuyo responsable fue un afamado relojero que colocó este tipo de utensilios por toda la geodesía española. Se negociación de Lorenzo Redondo Bonilla, un reputado profesional de Motilla del Palancar (Cuenca) que tras la bonanza de su negocio acabaría fundando una fructífera empresa que llamó “Relojería Franco-Suiza”.

“Relojes de torre sistema Redondo con patente de invención por 20 años, campanas metal Font a 2’25 pesetas kilo. Se han colocado en varias provincias de España y se mandan catálogos con precios y condiciones”, rezaba la publicidad de la época que se hacía en la prensa la “Relojería Franco-Suiza”. El temporalizador del Ayuntamiento de Siero se instaló en torno a 1890, según la información municipal apto, si correctamente algunos autores sitúan la colocación un año a posteriori, en 1891. Sea como fuere, lo cierto es que unos primaveras a posteriori, todavía en anuncios de prensa, el relojero se promocionaba con una relación de las 16 provincias españolas y las más de setenta localidades interiormente de ellas en las que había puesto relojes.

“Relojes de Torre instalados por Casa Redondo (…) Pidan catálogos” se leía en un anuncio en el publicación El Liberal en 1912. En la relación publicada, en Asturias, entonces como provincia de Oviedo, solo se citaba el de Pola de Siero.

El temporalizador de la Casa Consistorial polesa –que vivió algunas polémicas a cuenta de los intentos de mecanizar el sistema, poco que contó con la concurso de colectivos y vecinos- sigue más de un siglo y tres décadas a posteriori sumando horas a su bella historia.